Los servicios de belleza necesitan nuestras voces

No creo que haya sido solo yo el que hizo una excepción a la forma en que se habló de los servicios de belleza y los salones en el parlamento la semana pasada cuando los parlamentarios anunciaron que permanecerían cerrados mientras abrieran los bares. Como economía, la industria de la belleza ofrece ingresos muy necesarios (y muchos) y si los pubs pueden abrir, no hay razón para que al menos ciertos aspectos de los tratamientos de salón no puedan. La actitud en el parlamento era que la belleza se considera divertida de alguna manera, tal vez una frivolidad, cuando en realidad no son nada.
No gritamos sobre nuestros salones de belleza de la misma manera que celebramos a nuestros peluqueros, por ejemplo. No somos comunicativos cuando se trata de zapping de venas, alisado de la frente o blanqueamiento del labio superior, no importa llevar a las redes sociales para decir cuán encantados estamos con nuestra cera. Estamos lo suficientemente felices de mostrarle a Instagram todo nuestro nuevo tinte ombre, pero rara vez vemos los resultados de un enhebrado de axilas profesional.
Y, sin embargo, en la búsqueda de Google, hubo más resultados (3,450,000,000) para los procedimientos de depilación que los que hubo para peinados (3,440,000,000). Estamos muy condicionados a mantener en secreto nuestra ruta hacia la "belleza", como algo que no se debe compartir con los demás. Todo el rodar, el zapping, el punzonado, el láser: no se comparte de la misma manera que recortar o teñir y debemos preguntar por qué.
Hay algo, creo, que se percibe como vergonzoso en no ser fácil, ya sea eso es sin esfuerzo juvenil, sin esfuerzo sin vello o sin esfuerzo de piel lisa, pero todos estamos en el mismo barco aquí. En el esquema de las cosas, mi mantenimiento es bastante bajo: tengo Botox dos veces al año para mantener mis párpados en alto (no estoy listo para decidir si quiero deshacerme de la sombra de ojos para siempre y esperar que ese momento ocurra naturalmente, aunque pensé que lo haría durante el bloqueo, en realidad no lo ha hecho), Profhilo por el brillo, nuevamente un par de veces al año, y todo lo demás lo hago yo mismo. Aunque hice un hash de mis axilas la última vez, creo que es hora de entregar ese trabajo en particular (y línea de bikini) a un profesional.
Pero aunque nada es un secreto, nunca pienso mencionarlo de la misma manera Me gustaría un vestido o zapatos nuevos. Los salones generalmente existen en una calle principal: esa ubicación se elige para que pueda hacer su entrada o salida de la manera más discreta (sin dejar de estacionarse) para que su esfuerzo no se descubra fácilmente. Algunos tratamientos se han `` normalizado '' más, como las cejas y las uñas, al estar abiertos a la vista en grandes almacenes o tiendas con frente de vidrio y, por supuesto, personalmente, no estoy dispuesto a permitir que los espectadores sean testigos de mi facial, tampoco me siento cómodo con guardar lo que hacemos y por qué un secreto hasta el punto de que los parlamentarios se ríen de nosotros en el Parlamento. Esas mujeres (y usualmente lo son) que aspiran, arrancan, golpean, pelan y amasan: les debemos mucho y no merecen ser nuestros secretos tácitos. Especialmente ahora. Si puede, firme la petición en línea para obtener más de 40,000 salones con aproximadamente
300,000 empleados capaces de operar a un nivel seguro abierto y ganando nuevamente. Esta aquí. Divulgación de transparencia Todos los productos me son enviados como muestras de marcas y agencias, a menos que se indique lo contrario.
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